En esta novela, el Doctor Archibald Joseph Cronin nos pone en la piel de un joven pobre y huérfano desde los doce años. Criado por un familiar lejano que le hacía ver con desprecio la carga que para ellos significaba. David Moray, (como se llama dicho protagonista) tuvo la suerte de que su padre antes de morir le dejara un seguro de estudio, el cual no era mucho, pero cubría lo justo y necesario para sus sostén mínimo.
En base a sacrificios, vive en pensiones, padece hambre, usa la ropa hasta que no da más… logra recibirse joven, de médico y con todos los honores que la universidad escocesa brindaba por ese entonces.
Todo viene bien en la vida de David, se enamora, le ofrecen un buen puesto en un hospital del lugar… pero; siempre hay un pero, “el diablo metió la cola”, (diría un viejo refrán) y una gran alternativa económica llega a su vida… pero para acatarla debe casarse con la hija de su futuro jefe…
A partir de allí, con el paso de los años, logra amasar una interesante fortuna… pero no hay paraíso ni psicofármaco alguno que acallen los remordimientos de un alma en pena…
¿Estará a tiempo de sanear su pasado, en pro de un futuro nuevo?... ¿Podrá hacer un cambio de raíz, en su vida quien se apegó tanto a lo material y las amistades superfluas?...
El Arbol de Judas, una historia atrapante, sutil, impecablemente descrita, que le llegará al corazón, en un recorrido por muchas de las sensaciones del alma humana… escrita en 1963, un viaje por Escocia, Calcuta, Suiza, Estados Unidos… una metáfora de la búsqueda de la expurgación de errores juveniles, un encuentro de dos realidades antagónicas y un alma débil.
Te la recomiendo,
Ariel