Cba., 22 de Abril de 2013
Hace varios años que los cordobeses padecemos el injusto yugo de pagar peaje, a la hora de querer transitar por las benditas rutas de nuestra provincia. Es cierto que cuando se planteó darle cierto nivel internacional a las rutas de acceso a Córdoba RAC, -muy lejanas a las autopistas del primer mundo-, se optó por el criterio en el cual se argumentaba “que paguen por la manutención de una ruta, quienes hacen uso de ella”.
El tema es que si bien este criterio es lógico, es práctico, puesto que aquellas personas que no se mueven de su pueblo, o solamente se manejan por el norte cordobés, por dar un ejemplo, no tienen porqué mantener los caminos del sur provincial.
Pero como estamos en un país democrático que avala la pirámide kantiana de legitimación, en la que se establece que todo aquello que permite la Constitución Nacional (C. N.) no puede ser negado por ley alguna, constituciones provinciales u ordenanzas municipales. Inversamente, todo lo que niega la C. N. no puede ser permitido en ninguna provincia o municipio.
El artículo 14, de la C. N. explaya que “Todos los habitantes de la nación gozan de los siguientes derechos…entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino”…y como allí no se aclara si este transito es libre o rentado, para fundamentar el libre tránsito por las rutas públicas argentinas, tenemos que respaldarnos en el art. 33 de la citada constitución, que dice “Las declaraciones, derechos y garantías que enumera la constitución, no serán entendidos como negación de otros derechos y garantías no enumerados; pero que nacen del principio de la soberanía del pueblo y de la forma republicana de gobierno”.
Por todo lo antes dicho, el libre tránsito por rutas cordobesas, (E53- R20- R9- etc.) es un derecho que no nos lo puede quitar gobernador alguno, ni siquiera abogando en pro del derecho laboral de los empleados de las cabinas de peaje; ya que si bien ellos tienen un derecho a trabajar, los más de tres millones ochocientos mil cordobeses, tenemos derecho al libre tránsito, incuestionable e indelegable. Que a los empleados de la RAC les ofrezcan capacitación y la posibilidad de insertarse en otra área de la administración pública y a nosotros nos den el libre tránsito por las rutas cordobesas.
El sistema de peajes, sería justo si dicho camino, ruta o autopista en cuestión, sería hecho cien por ciento en terrenos privados, y con capital privado. Es decir que, si para ir de A hasta B si tardo media hora menos, yendo por el lote de Juan, él está en todo su derecho de cobrarme “X” cantidad de plata para la manutención de su camino y zonas aledañas. Pero en el caso que padecemos los cordobeses es todo mucho más patético, ya que estas rutas como la ampliación y mejoramiento de la ruta E53 en el tramo que va de Córdoba a Río Ceballos por ejemplo, fue hecho íntegramente con capital proveniente de los impuestos que pagan los cordobeses, (como bien aclaraban los carteles puestos por el ex gobernador Schiaretti).
Yo me pregunto ¿A dónde va la plata que día a día, miles de cordobeses dejamos en las cabinas de peaje, ya que a la vera del camino ni siquiera cortan el pasto? Si alguien pincha una goma de noche, se encuentra en medio de la boca del lobo, puesto no hay iluminación, -claro los cordobeses todavía no juntamos la plata para poner la iluminación pertinente!- , y tampoco se halla a menos de tres kilómetros de distancia un teléfono público, una ambulancia, una estación de servicio con minishop, una posta policial las 24 horas, digo yo, no…
Ya que juntan plata, que no sea solamente para mantener los sueldos de alguien que cumple una función anticonstitucional. Y que quede claro, no voy en contra del empleado, el cumple su labor, sino en contra el contrato que firmó el ex gobernador Mestre, para con los consecionarios de las R. A. C. por décadas y que nos atan, a todos los cordobeses a esta injusticia. Hace mucho que Ramón Mestre no es gobernador; ¿No?... Y ninguno de los que vino después ni en el ejecutivo, ni en la unicameral, ni en el ERSEP no hizo nada, en relación a al libre tránsito en Córdoba.
¿Será que no es tema de campaña, o de agenda?
FIN.
Lic. Prof. E. Ariel Rodríguez